Mi querida
Amor hacia uno mismo
Mi querida,
- Quizás demasiado a menudo corrías hacia donde decían "vete".
- Quizás demasiado a menudo, al abrir tu corazón, te encontrabas con un muro indescifrable.
- Quizás demasiado a menudo te mentías a ti misma porque la verdad parecía demasiado difícil de soportar.
Tal vez no escuchaste esas palabras pronunciadas desde lo más profundo del puro asombro por ti misma:
Te amo, eres un milagro, adoro todo lo que eres...
Quizás así fue...
Pero AHORA, deseo que finalmente lo escuches de ti misma, y entonces todo el Mundo lo repetirá como un eco agradecido:
- Te amo, eres un milagro dado a este Mundo por la propia VIDA.
- Te amo, porque todo lo demás es mentira.
- Te amo y te abrazo con confianza en su TOTALIDAD.
Querido/a, el dolor nunca te nutrirá con la Verdad, solo cumple su función para que toda esta identificación con lo irreal pueda disolverse. ¿Cuándo sucede esto? En el momento en que dejas de seguir la historia de la Mente, que sugiere que algo anda mal contigo. Te aseguro que está todo muy bien, exactamente como debe ser en este momento.
A veces debes llegar a un punto límite de tu resistencia para que un claro ¡BASTA! te dirija hacia un nuevo potencial de realidad. No estás obligado/a a nada que no sea una clara navegación del Corazón, ya es hora de descodificar esas eras de malentendidos globales.
- La masa de programas, gobernada por la creencia en un administrador externo, acepta todo este DESFILE. Disfrazados con patrones temerosos, no vemos la necesidad de dejar de alimentar con energía este loco guion.
- El silencio global ¡BASTA!, es una estrategia de Transformación sin conflicto, en la que simplemente dejamos este dimensión dual.
- NADIE tiene la obligación de quedarse en la zona de la historia corrupta.
- Observa cómo te ríes de esas sugerencias de que no puedes.
- No luchas, ignoras las órdenes externas.
Solo escuchas tu propio Corazón.
Y ya está...
por muy importante que parezca.
Jeśli ten przekaz odnajduje echa w Twoim sercu, wyraź to, zostawiając tutaj ślad swojej obecności. Dotknięcie serca symbolizującego 'lubię' czy 'kocham', czy też podział się nim, rozszerza nasze wspólne pole świadomości. Twoja reakcja jest cennym echem, które pomaga tkać naszą rzeczywistość z nici miłości i jedności.
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